por Laura
No sé como he llegado a casa, pero ya estoy aquí. Yo no pensé que dolía tanto los días después. En la operación no me enteré de nada pero cuando eso empezó a despertar, empecé a pedir calmantes, porque Gaby ya me había informado que antes de que empezará a dolerme pidiera, pero se empezó a despertar muy rápido.

Se fueron todos y no veas como empezó a doler la rodilla. En eso que entran con mi cena, y le digo "ahora? ahora no tengo hambre" pero me comí un purecito, el pescado se quedó ahí. Lo que a mi no me gustaba se lo comía mi madre, así nos alimentábamos las 2, que pobre la tenía de arriba a abajo pidiéndole cosas.
La noche, tenía mucho sueño porque los dos días anteriores dormí poco para dormir en el hospital mejor, pero que va, no me dormía ni contando ovejitas, así que pedí una pastilla para dormir y un calmante. Me duró de 12 a 3 y de 3 a 8 nada de nada, mirando el techo, porque me sabía mal despertar a mi madre.
Pasa el segundo día, y a las 18h consigo relajarme y dormirme. En eso que entra el médico a las 19h a quitarme drenaje, me habían dicho que dolía pero no hasta ese punto, vi las estrellas, se me ha quedado la cara del médico grabada, entra y me levantó la pierna de golpe, para quitarme vendaje, y después con el drenaje uuuffff, hasta mi madre se desmayó... y las enfermeras buscándole el pulso a mi madre y yo muerta de dolor en la habitación. Dios mío, que hombre más bestia, lo odiaré de por vida. Hasta las enfermeras alucinaron de como me trato.
Vino Jorge y Juanjo a verme, en el peor momento, cuando estaba aún rabiando de dolor, me pusieron al día del equipo, siempre es bueno saber como esta el equipo, aunque me da rabia y envidia de no estar ahí.

Ya estoy en casa, en el sofá quieta porque cada vez que necesito ir al wc me lo pienso 10 veces porque es cuando me duele, así que... sofá sofá sofá.
A ver si mañana tengo fuerzas para ir a ver el partido.
Me voy unos días y Gaby y Pao abandonan el blog ehh, es que no saben estar sin mi, jejeje.
0 comentarios:
Publicar un comentario